Las pantallas están donde quiera que miremos.
los utilizamos para mantenernos en contacto con amigos y familiares, comprar, jugar y leer lo último en noticias y entretenimiento.
En el mundo de hoy, es importante presentarles a nuestros hijos estas nuevas y divertidas tecnologías.
pero debemos asegurarnos de que no se vuelvan dependientes de las pantallas para controlar el comportamiento.
Demasiado tiempo frente a una pantalla está asociado con problemas de adicción y aprendizaje a largo plazo, menor rendimiento académico, y comportamiento negativo.
El cuerpo de un niño de 2 años está diseñado para correr, jugar y saltar, no para estar 3 horas sentado frente a una pantalla.